Fotos: Francisco SandovalBestiario : un nuevo mural en nuestra ciudad[1]
Acaba de inaugurarse formalmente por parte de las autoridades municipales el mural hecho por el Colectivo la Torana que se encuentra sobre una de las paredes de la 7ª. Av. 3era Calle de la zona 13, a la derecha al subir el desnivel por el que se va de la Av. Liberación hacia los Museos. Dicho mural fue denominado Bestiario por sus autores, el Colectivo La Torana, integrado por Marlov Barrios, Josué Romero, Plinio Villagrán, Eric Menchú y Norman Morales.
Un bestiario (o Bestiarum vocabulum) es un compendio de bestias. Un bestiario es una recopilación en forma de volúmenes ilustrados que describían animales, plantas e incluso rocas. Se hicieron muy populares durante la Edad Media y recogían la historia natural y la ilustración de cada una de las bestias citadas, las cuales aparecían con un mensaje acerca de su razón de ser y de su significado moral.
El mural al lado de la Universidad está hecho en azulejo y representa varios animales propuestos por cada artista y en el siguiente orden de izquierda a derecha: un saltamontes, un pavorreal (Marlov Barrios), un dragón con un mono encima y unos animales acuáticos (Josué Romero), un ganso (Plinio Villagrán), dos venados (Eric Menchú) y por último un caracol de (Marlov Barrios). Los artistas optaron por el uso de azulejos porque son durables, se pueden tocar, y, en caso de agresiones, sustituirse.
Fue ejercicio visual y conceptual que partió de las emblemáticas figuras: la serpiente y el acueducto. La primera, por su trasfondo prehispánico; la segunda por ser una herencia occidental y colonial. La manera en que fue dispuesto alude a una solución formal maya. El mural presenta una fusión iconográfica de lo maya y lo europeo, elementos que definen el origen de nuestra actual cultura.
Bestiario es un juego visual que requiere conocimiento del arte, pero también está hecho para que cualquier persona disfrute viéndolo, pues colores son primarios y sus formas, zoomorfas y orgánicas, agradables. En su concepto se trata de una interpretación poética, onírica y subjetiva de animales que realmente no existen en la realidad y por eso retoma la zoología fantástica planteada por Cortázar.
Este es el segundo mural hecho por este Colectivo, el primero se encuentra cerca del IGSS de la Roosevelt. Estas dos obras de formato monumental hechas ex profesamente en sitios hostiles de la vía pública, con materiales durables y bastante permanentes pretenden lograr un sentido de pertenencia del citadino. Pretenden llegar a ser un punto de referencia en la ciudad y proponen formas amigables y lúdicas para el transeúnte en un momento de gran hostilidad social.
Fue un ejercicio creativo para sus autores, pues este proyecto colectivo les servirá para resolver obras posteriores.
Buscaron que no fuera fácilmente legible, sino que exigiera la interpretación y participación del público; de allí lo difícil y poco accesible, en primera instancia, de las figuras.
No obstante, alegra la ciudad, le pone color y calor y nos recuerda, al fin y al cabo, que la ciudad está hecha por y para seres humanos.
s. herrera u.
Acaba de inaugurarse formalmente por parte de las autoridades municipales el mural hecho por el Colectivo la Torana que se encuentra sobre una de las paredes de la 7ª. Av. 3era Calle de la zona 13, a la derecha al subir el desnivel por el que se va de la Av. Liberación hacia los Museos. Dicho mural fue denominado Bestiario por sus autores, el Colectivo La Torana, integrado por Marlov Barrios, Josué Romero, Plinio Villagrán, Eric Menchú y Norman Morales.
Un bestiario (o Bestiarum vocabulum) es un compendio de bestias. Un bestiario es una recopilación en forma de volúmenes ilustrados que describían animales, plantas e incluso rocas. Se hicieron muy populares durante la Edad Media y recogían la historia natural y la ilustración de cada una de las bestias citadas, las cuales aparecían con un mensaje acerca de su razón de ser y de su significado moral.
El mural al lado de la Universidad está hecho en azulejo y representa varios animales propuestos por cada artista y en el siguiente orden de izquierda a derecha: un saltamontes, un pavorreal (Marlov Barrios), un dragón con un mono encima y unos animales acuáticos (Josué Romero), un ganso (Plinio Villagrán), dos venados (Eric Menchú) y por último un caracol de (Marlov Barrios). Los artistas optaron por el uso de azulejos porque son durables, se pueden tocar, y, en caso de agresiones, sustituirse.
Fue ejercicio visual y conceptual que partió de las emblemáticas figuras: la serpiente y el acueducto. La primera, por su trasfondo prehispánico; la segunda por ser una herencia occidental y colonial. La manera en que fue dispuesto alude a una solución formal maya. El mural presenta una fusión iconográfica de lo maya y lo europeo, elementos que definen el origen de nuestra actual cultura.
Bestiario es un juego visual que requiere conocimiento del arte, pero también está hecho para que cualquier persona disfrute viéndolo, pues colores son primarios y sus formas, zoomorfas y orgánicas, agradables. En su concepto se trata de una interpretación poética, onírica y subjetiva de animales que realmente no existen en la realidad y por eso retoma la zoología fantástica planteada por Cortázar.
Este es el segundo mural hecho por este Colectivo, el primero se encuentra cerca del IGSS de la Roosevelt. Estas dos obras de formato monumental hechas ex profesamente en sitios hostiles de la vía pública, con materiales durables y bastante permanentes pretenden lograr un sentido de pertenencia del citadino. Pretenden llegar a ser un punto de referencia en la ciudad y proponen formas amigables y lúdicas para el transeúnte en un momento de gran hostilidad social.
Fue un ejercicio creativo para sus autores, pues este proyecto colectivo les servirá para resolver obras posteriores.
Buscaron que no fuera fácilmente legible, sino que exigiera la interpretación y participación del público; de allí lo difícil y poco accesible, en primera instancia, de las figuras.
No obstante, alegra la ciudad, le pone color y calor y nos recuerda, al fin y al cabo, que la ciudad está hecha por y para seres humanos.
s. herrera u.
[1] Recopilación de notas de entrevistas realizadas a Eric Menchú y Marlov Barrios, noviembre 2008
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