jueves, 30 de julio de 2015

Junkabal, colectiva de arte 2015





Lugar: Anacafé, 5a calle 0-50 zona 14

Fecha: del 3 al 6 de agosto

Hora: 9 am a 6 pm

Entrada libre



Del verbo ilustrar que significa iluminar, alumbrar, sacar a la luz, divulgar, este vocablo se relaciona  con dar luz al entendimiento.  Leslie Nanne, Christine Varadi, Arturo Monroy, Guillermo Maldonado, Fernando Valdiviezo, Doniel Espinoza, María Aguilar y Erwin Guillermo traducirán e iluminarán con sus obras textos de Augusto Monterroso, Rafael Arévalo Martínez, Miguel Angel Asturias, Virgilio Rodríguez Macal, Mario Monteforte Toledo, Luis Cardoza y Aragón, María Elena Schlesinger y Humberto Ak´abal como una manera de unir creatividades y subrayar nuestro acervo cultural.

Este maridaje literatura-artes visuales forma parte de la Colectiva de Arte de Junkabal 2015 que este año cumple dos décadas.  Dichas obras –además de muchas más- estarán en exposición y a la disposición de coleccionistas del 3 al 6 de agosto en horas hábiles, en el vestíbulo de Anacafé.




AUGUSTO MONTERROSO

La rana que quería ser una rana auténtica

              Había una vez una rana que quería ser una rana auténtica, y todos los días se esforzaba en ello.

              Al principio se compró un espejo en el que se miraba largamente buscando su ansiada autenticidad.  Unas veces parecía encontrarla y otras no, según el humor de ese día o de la hora, hasta que se cansó de esto y guardó el espejo en un baúl.

              Por fin pensó que la única forma de conocer su propio valor estaba en la opinión de la gente, y comenzó a peinarse y a vestirse y a desvestirse (cuando no le quedaba otro recurso) para saber si los demás la aprobaban y reconocían que era una rana auténtica.

              Un día observó que lo que más admiraban de ella era su cuerpo, especialmente sus piernas, de manera que se dedicó a hacer sentadillas y a saltar para tener unas ancas cada vez mejores, y sentía que todos la aplaudían.

              Y así seguía haciendo esfuerzos hasta que, dispuesta a cualquier cosa para lograr que la consideraran una rana auténtica, se dejaba arrancar las ancas,  los otros se las comían, y ella todavía alcanzaba a oír con amargura cuando decían que qué buena rana, que parecía pollo.


Imagen:  Leslie Nanne,  Selfie, 2015, collage y acrílico/tela, 100x100 cm 



Para leer lo publicado el 29.7.15 en Siglo21 presiona   aquí







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